Hay mucho que descubrir acerca de la música, algunas cosas muy inusuales, y algunas otras que usualmente las descubrimos una y otra vez cada que escuchamos nuestra canción favorita.
En algún momento, en Francia, un compositor decide darle vida -talvez sin saberlo- a la obra más larga jamás compuesta: Vexations
Erik Satié, cuenta poco acerca de una de sus creaciones más famosas.
Es una obra de 2 minutos de duración para piano con la indicación de
ser repetida el número de veces justo para que el tema sea ejecutado 840
veces. La duración total, con las repeticiones, es de aproximadamente
21 horas, convirtiendola esto en la obra más larga jamás compuesta. No
sobrevive ninguna explicación de Satie para la excepcional longitud de
la pieza, aunque existe una serie de estudios de John D. Kramer en los
que se afirma que el escucha de música es capaz de entrar en un estado
alternativo de percepción del sonido, después de escuchar la repetición
exhaustiva de un patrón musical.
En sí, la obra tiene un color muy tétrico, oscuro, y -a mi gusto muy personal- no me agrada la idea de escucharla 21 horas seguidas.
Puedes encontrar aquí las partituras :)
estoy contigo
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